El euskal sen, y poder concretarlo hoy y aquí, nos necesita
Hemos lanzado este proceso para desvelar el misterio del Sena o instinto cultural vasco. Para que, siguiendo esta Euskal Sena, sigamos haciendo vida vasca, con sentir vasco.
Como hemos dicho, porque este tema aún no está incluido en la investigación y estudios de los llamados ‘Temas Vascos’, ni siquiera en su agenda. Y, para llevar a cabo este desafío, una participación nacional es apropiada y, más aún, inexcusable.
Nuestro trabajo no es sino iniciar el proceso. Deseamos que llegue a un nivel nacional, y a ello viene la actual síntesis de los actuales resultados. Grupos, agentes e interesados vascos de cualquier tipo somos llamados para realizar, entre todos, esta tarea nacional tan importante de caracterizar el Euskal Sena en nuestra generación, a comienzos del milenio, como propuesta y legado para las posteriores.
Este proceso nunca debe terminar, al menos si Euskal Herria ha de mantenerse viva. Nuestra intención es plantear este debate nacional. Porque existe una Euskal Sena, pero sólo se materializa en fulano, mengano y zutano; es decir, cada cual a su manera. Cada uno de nosotros tiene, por lo tanto, qué decir y qué hacer para dar forma a cómo vemos el Euskal Sena. Así, también, las próximas generaciones, si continúan el proceso, podrán darle su propia forma.
Y no importa si los extranjeros, o nuestros paisanos de mente extranjera, nos echan en cara que estamos construyendo ideales, o una utopía. Por supuesto que sí. Pero el Euskal Sena será lo que los vascos de cada momento decidan o elijan, nada más. Aunque luego no nos dejen reflejarlo a nivel práctico en nuestras instituciones y organización socioeconómica, al menos sabremos bien cuál es nuestro instinto cultural y popular. Nosotras las vascas, las que tenemos Euskal Sena y/o queremos vivir de acuerdo con él, determinaremos qué es para nosotras el Sen vasco, nadie más.
Si esta fase es exitosa, lo siguiente será explorar y trabajar colectivamente el Euskal Sena, en auzolanes, siguiendo este instinto cultural. Con Auzolanes centrados en inciativas burujabes o soberanas, llevadas a Batzarres o concejos, reforzando los comunales tangibles e intangibles, podremos avanzar hacia la utopía de este esquema y del Derecho Pirenaico que lo garantiza. Incluso todavía sin estado, fortaleciendo de facto nuestra soberanía.
Cuando Mari enjambraba su hilo de oro en la rueca, dejando que cayera a la Tierra y, en su interior, a la plenitud de su vacío, también estaba hilando el Euskal Sena que todavía podemos revivir. Pues en este milenio todavía no ha desaparecido un sentimiento que proclama Euskalduna naiz eta harro nago! ‘¡soy vasco y estoy orgulloso de ello!
Si deseas materiales más extensos sobre este tema, dirígete al Documento Base sobre el Euskal Sena. Si deseas versiones más breves, continúa navegando por estas claves.
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